lunes, 26 de abril de 2021

11 - El proceso de cada paso.

 Buenas


¿Cuántos golpes al cincel tuvo que darle Miguel Ángel para hacer el David?

El bloque se le entregó a Miguel Ángel cuando ya un par de escultores intentaron algo en el, pero acabó abandonado en una cantera al no lograr sus propósitos.

La escultura mide 5,17m de alto.

Y no solo el cuantos golpes de cincel, sino el golpe "justo" en cada momento.

Quebrar esa escultura por un golpe mal medido sería fatal.

Una vez escuché a una profesora de piano decir que había ciertas personas que se podrían obsesionar un poco en su búsqueda de la perfección en las prácticas. Noté que lo decía con cierto toque de menosprecio hacia esa postura.

Comprendo a la perfección que piense así, aunque me extraña un poco desde el punto de vista de una profesora.

Desde mi perspectiva, (que tiene un valor absoluto de cero), creo que debo ir a por el 100% sabiendo que me quedaré muy por debajo del 50%, porque si voy a por 75% puede que no llegue ni al 10%.

Cada golpe que Miguel Ángel le daba al mármol, aparte de cumplir su función lógica de desgastar la piedra para llegar donde el deseaba, quiero pensar que era una práctica en la forma de dar el golpe.

El ángulo del cincel, la intensidad del golpe, la capacidad de concentración en ese momento para darlo (cansancio u otras sensaciones emocionales), cantidad de luz que le permitiera hacer su trabajo, etc.

No creo que el pensara en las consecuencias físicas que le acarrearía ese trabajo, aunque al hacerlo las sufriera. Como cuando pintó la Capilla Sixtina. Pero puestos manos a la obra, había que hacerlo si o si, y además bien.

Dos años le llevó hacer el David. Tenía que hacerse bien, no tenía que hacerse rápido.

La confianza la da la práctica, y el resultado de la práctica hay que seguir practicándola, y aún así la seguridad total no existe porque existen los imprevistos. Esos en los que nunca hay que pensar antes de que lleguen. 😄

Pero creo firmemente que si uno hace lo que debe y practica buscando ese 100%, cuando llegue un imprevisto, seguro que se podrá afrontar muchísimo mejor que si se está dubitativo e inseguro.

Todo esto no dejan de ser pensamientos en voz alta y conversaciones conmigo mismo con el fin de tomarme en serio la parte más seria de lo que no deja de ser una afición.

Sé en que acabará todo si me relajo tanto que no atienda lo que de verdad es importante para disfrutar de esto que me está gustando muchísimo.

Desde un primer momento comenté que no iba a proponerme metas. Ni a corto ni a largo plazo, que me concentraría en el día a día y en las prácticas que fuera haciendo para realizarlas lo mejor posible.

Pues si que me pondré una meta.

Que mi base de solfeo sea la mejor que pueda lograr tener.

Sé que dicho así suena "¿escaso?" pero yo me entiendo jejejejeje.

Practicar, practicar y practicar. Por ahora no hay más.

Un saludo.


Y poco de música de esa que alegra el alma. Que nunca viene mal jejeje.





domingo, 25 de abril de 2021

10 - Entrada editada por burro.

Buenas.

Para que andarse con rodeos.

Tengo que editar este hilo porque ayer, una persona, con dos frases lapidarias me demostró que la realidad me abofetearía de nuevo, y eso podría causar confusión en alguien más.

"No es que sea un diminuendo, es que la mano izquierda tiene dos voces.

Sobre dinámicas, Bach nunca las puso. Van a gusto del consumidor."

Esto que parece una simple explicación dejó claras varias circunstancias.

La primera que en solfeo sigo pez. La segunda que para poder discernir lo de las dos voces, hay que estar capacitado para verlo y yo no lo estoy. Lo tercero, que no me he trabajado a Bach lo suficiente como para saberlo. Puedo haber leído mucho de el, pero me quedé en la superficie. Incluso varios palmos por encima.

El mismo romanticismo al que mi mente está acostumbrada pensando lo estupendo que sería ser pirata al ver una peli de piratas, es el que consigue que me cueste darme cuenta que tengo que centrarme en practicarlo..... ¡¡¡ TODO !!!

No pensar que algo que aprendo sobre la marcha la lo puedo poner en práctica y listo.

¡¡¡ Que va !!! Esto no funciona así.

Una pregunta que me hice a mi mismo (y que creo que me repetiré muuuuchas veces)  fue: "¿Cuánto crees que te falta para poder pasarle las páginas de las partituras a Richter en un concierto.?"

Me puse hasta colorado. Que vergüenza. 😔

Poco a poco voy teniendo claro que para seguir con mi aprendizaje tengo que hacer una catarsis descomunal en cuanto a conceptos. No me está sirviendo nada de lo que pensaba que podría utilizar.

Bueno, nada nada tampoco. Los recursos de memoria muscular y algún par de cosillas si, pero no es ni el 0,05%  de como debo plantearme mi sistema y forma de estudio.

Algo que si creo que hice bien de mano fue el no dejarme llevar por las ansias y querer empezar a tocar temas enseguida. 

Suponer que tendría que hacer un trabajo previo de preparación me vino muy bien. Ni idea de que fuera a ser "muchísimo más" de los que suponía. Pero mi actitud me está ayudando mucho desde el comienzo.

No varíe mucho el sistema aunque si lo amoldé un poco a las necesidades actuales. Sigo con mis ya 15 minutos de ejercicios mañana y noche, a los que esta semana les incorporo todo lo que tiene que ver con los compases y tiempos. Tendrían que ser 10 minutos, pero necesito esos 5 más porque el estar atento a los pulsos y compases me lleva sus tiempo.

Tiempo....... como me confundí contigo. Que burro soy.

Caña a la teórica. Pero que muchísima caña.

El Dandelot me lo llevaré a todos lados. Bien en el móvil (que ya tengo varias páginas en el) y en casa hoy comencé a volver a leerlo pero además hice otra cosa. 

Leo y resuelvo el ejercicio y una vez que lo acabo, vuelvo a hacerlo pero escribiéndolo en papel pautado. Si así tiene que ser, así será.

El Francisco Moncada y sus complementos, como si me fuera la vida en ello.

Es lo debido, es lo necesario.

Cuando tienes preguntas, la vida te da respuestas.

Hoy me acordé de algo que también me abrió los ojos.

Hace poco más de año y medio mi padre rompió la cadera, y después de operarle le llevaron a otro hospital para hacerle la rehabilitación.

En esa planta había dos tipos de afectados. Los de cadera y los que sufrieron un ictus.

Me vino a la memoria un señor (debía rondar los 50) el cual, si estaba sentado, parecía de lo más normal del mundo, pero le había afectado al habla y al andar.

Cuando intentaba andar, ni que decir tiene que la falta de coordinación de un lado era inexistente. Ya había visto casos antes y eso no me llamó la atención. Lo que me acongojo bastante era lo del habla.

Emitía ruidos claros, no eran balbuceos. Se notaba el esfuerzo por intentar vocalizar, pero le era imposible. Yo charlaba con el porque parece como si le comprendiese lo que quería decir por los énfasis, modulaciones y otras cosas que no sé explicar, pero el asentía diciendo que si, que eso era lo que quería.

Ahora pienso en el trabajo que a ese hombre le llevará el volver a hablar de forma que se le entienda, solo que se le entienda, porque la vocalización que tenía antes, le llevará años. Pero no solo eso, sino lo que debe sentir al ver que no es capaz de utilizar eso que antes daba por supuesto y que le resultaba tan fácil.

Esa es la sensación que ahora mismo tengo con esto. 

No puedo permitir que mi ignorante ego (que engloba todo, orgullo, soberbia, prejuicios, etc, etc, etc, etc, y más eteces) me limiten mi camino. tengo que aplicar mucha más humildad, incluso la que no se ni que existe.

Lo primero creo que lo estoy haciendo muy bien, reconocer errores, aceptar que son lógicos y resolver.

No cabrearme, sino sacar lo positivo de todo y no permitir a la "loca de la casa" que pierda el tiempo con elucubraciones tontas. Acción y listo.

Termino esta entrada repitiéndome la misma pregunta: "¿Cuánto crees que te falta para poder pasarle las páginas de las partituras a Richter en un concierto?"

Y no me refiero al tiempo 😉

Un saludo



sábado, 17 de abril de 2021

09 - Practicar mucho..... pero con cabeza.

 Buenas.

Las consecuencias de esta última semana, unido a la nueva forma de practicar me han hecho replantearme fijarme más en lo que posiblemente estuviera haciendo mal.

Se me sugirió que cambiara el asiento. Respondí a dicha sugerencia que me encontraba bastante cómodo y de altura me parecía que estaba bien.

Anoche se me ocurrió poner encima de dicha banqueta un par de libros bastante gruesos y grandes.

Tuve que rendirme a la evidencia. Esos 7 centímetros de más no solo eliminaron tensión en manos y antebrazos. Las mejoras fueron muchas. No me quedó más remedio que encargar una banqueta de piano regulable.

Con el nuevo cambio de postura, (porque al elevarme se cambio en muchos aspectos), empezaron a aflorar otras cuestiones.

Claro, debía de poner a prueba esas cosas que iba aprendiendo sobre las posiciones desde la nueva perspectiva, y menos mal que lo hice.

Aprender de nuevo a relajar las manos y los brazos, la postura de la espalda, etc,  y según lo iba haciendo recogía los beneficios.

Encargué una banqueta de cuatro patas, no de las de tijera. Peso bastante y no me fiaba de la estabilidad que me pudieran ofrecer las de tijera, así que escogí una de madera con forma tradicional.

Empecé a practicar desde la nueva posición y al sentir mis manos más cómodas quise ahondar más en una práctica sensata.

Hoy me centré en la "cantidad", desde la premisa, claro está, de que siempre debe haber calidad en la práctica.

Hice un experimento de los míos. 

Las escalas. ¿Cuántas repeticiones se pueden hacer durante 5 minutos a 60 ppm a una mano, en una y dos octavas?

En una octava, casi 22.

En dos octavas, casi 12.

Los "casi" los puse porque la escala era a ida y vuelta, y en la última, no llegaba a hacer la vuelta entera.

No me extraña que me dolieran las manos.

Siendo como soy, un proyecto de aprendiz, sin estar mis manos preparadas para estos nuevos movimientos y meterles 20 o 30 minutos, es más que excesivo. Aunque sea relevando las manos. 15 minutos de escalas me está pareciendo una verdadera burrada. Y encima eso era lo que utilizaba para "calentar".

Ser autodidacta es lo que tiene, aprendes "por las bravas".

Una vez leí que ha quien utiliza una libreta para seguir sus progresos. Me hice con una para mantener una disciplina en mis prácticas jeje

A partir del lunes (porque está claro que hoy y mañana mis manos descansarán), durante las próximas dos semanas 5 minutos a una mano, con cada una, descanso de 10 minutos, cinco minutos a dos manos y listo.

Mucha concentración en todo lo referente a mantenerlas relajas, hacer una buena digitación e intentar subir 3 minutos los 15 días siguientes. A ver como va ese proceso.

En las prácticas con melodía no bajaré el tiempo (30 min.), más que nada porque ahí me paro cada poco jejejeje no es como con las escalas, en las que el tocar es continuo.

En esta aventura, cuando ya pensaba que iba despacio, aparece algo que me dice que aún debo ir todavía más lento.

De hecho, la "loca de la casa" ya está pensando si podré practicar por la mañana y por la noche.

Me tiene hasta el moño 😄😄😄

Piano piano si va lontano.

(Despacio despacio se llega lejos).

Un saludo.


jueves, 15 de abril de 2021

08- Primera autoevaluación

 Buenas.

Hace dos meses que empecé "oficialmente" esta aventura. Hay que sumarle los casi tres meses que me costó tomar la decisión.

Pienso (algo que en mi es un peligro jeje) que es el momento de hacer una pequeña evaluación de como se está desarrollando todo.

Más o menos la conclusión sería.......

😄😄😄😄😄😄😄

Lo de desastre va más bien por el aspecto organizativo del sistema de estudio.

Tengo excusas para poder justificar el no ir mejor, pero no me apetece aplicarlas.

Soy un poco barullón a la hora de estudiar. No sigo, porque no lo hice, un plan de estudio diario.

Según me siento frente al teclado, utilizo el libro que más me apetece en ese momento, pero una vez que lo abro no mantengo un orden en la práctica.

Cierto es que no sé hacerlo, pero tampoco me parece que sea muy complicado seguir lo que pone la página. Incluso puedo dividir la ejecución de los ejercicios que realice diariamente. Pero es algo que se me está ocurriendo según estoy escribiendo esto. 

Es verdad que tampoco debo de martirizarme mucho ahora mismo con esto. En estos dos meses la cantidad de información útil adquirida fue mucha. Practique y estoy avanzando en cada práctica, lo que me hace muy feliz, pero estoy yendo un poco de acá para allá y eso entorpece un poco (bastante) la constancia y la práctica efectiva de ella.

Es verdad que, como ya comenté, no puedo tener un horario concreto de estudio y eso lo dificulta bastante, pero no es excusa para no estudiar el Dandelot de vez en cuando o tocar 10 minutos determinado ejercicio.

¿Quién me iba a decir que tocaría los diez primeros compases del preludio de Bach?

Eso era impensable hace no tantas semanas, con lo cual progresos hay, eso está claro, y algo que me reconforta es, que si en este pequeño caos que llevo por sistema estoy contento con el avance, si la organización mejorara ¿Qué no podría conseguir? y no me refiero a tocar ya el preludio perfecto, eso sería imposible, pero una mejora en la digitación, en la lectura, en la independencia de manos y dedos, etc.

Otro de los detalles que me alegra es mi atención sobre las cuestiones a corregir. Me alegra darme cuenta de ellas y poder aplicarles soluciones.

Dos meses. Unas 80 o 90 horas. Debo reconocer que eso es menos que un grano de arena en una playa, y aún así recibo ya los beneficios del sol.

Estoy contento y muy ilusionado, y eso es estupendo.

La política de no ponerme metas y solo centrarme en lo que en el día correspondía estudiar, está dando excelentes resultados. El tiempo fluye sin que sea algo que me presione o me lastre. De hecho estos dos meses se han pasado volando en ese aspecto.

No sé si esto les pasa a todos los autodidactas. No todos nos encontramos en las mismas circunstancias y no será igual para alguien que trabaje a turnos que para alguien que tenga bebes en casa, o alguien que no tenga absolutamente ninguna responsabilidad.

Cada uno deberemos bregar con las circunstancias que nos rodean, pero el hecho de ver lo que estoy consiguiendo me estimula mucho.

Si, tengo que hacer un plan de estudios diario. No podré ponerle horarios, pero si al menos las tareas a realizar.

Tampoco es que tenga mucha idea de como hacerlo 😄😄😄 más que nada porque los tiempos de práctica siendo inexperto varían con respecto a quien ya lleva una trayectoria. Pero el sistema pomodoro (buscarlo en la red, lo explicará mejor que yo) es más que interesante para estas cuestiones. Aparte de poder hacerlo progresivo.

Donde no me perdono el estar fallando es en la parte del estudio.

Si, estoy estudiando, pero sé que no como debiera. Debo estudiar mucho más y no de una manera tan "ligera" como lo estoy haciendo ahora. Debo concentrarme más y ponerle más énfasis. Ahí tengo que ser menos flexible conmigo mismo. En la lectura, por ejemplo, no estoy avanzando como me gustaría.

Desde un punto de vista general, estoy contento, pero debo ser sincero conmigo mismo en que no debo dejar pasar mucho tiempo sin limar esos "asuntillos" en los que cojeo.

Tengo herramientas más que de sobra para estar haciéndolo adecuadamente, y aquí no hay excusas si se quieren resultados.

Todo va bien 😊

Un saludo

07 - Los compases

 Buenas.

Esta entrada será cortita.

Desde hace días quería poner este vídeo que considero interesante para algo que me di cuenta de que me estaba pasando desapercibido. Los compases.

Los tengo delante en las partituras, estudié sobre ellos (algo), utilizo el metrónomo, etc. Pero no les estaba dando la importancia que debía. Estaban ahí pero les hacía poco caso.

Al empezar a estudiar el preludio me di cuenta que tenía que meterme más a fondo por ellos, de hecho están al mismo nivel de importancia en cuanto a aprenderlos hasta que sea como respirar, como lo es la lectura o las buenas posiciones.

Como el intentar explicarlo sería por mi parte un atrevimiento demasiado absurdo pondré este vídeo que a mi me ayudo mucho.

A quien le apetezca que eche un vistazo a ese canal por si encuentra algo que crea adecuado.

No lo puse en el listado de enlaces, porque en el solo pongo a quienes solicité permiso para ello. Y a este señor no lo hice todavía, pero lo haré en cuanto encuentre su email.



Un saludo

Edito: Recibí permiso para poder poner la página de esta escuela (Academia Mundo de la Música) que se encuentra en la lista de enlaces. Los vídeos están localizados dándole en el logo de YouTube. Merece la pena echarle un vistazo.

miércoles, 14 de abril de 2021

06 - No se ni que decir jeje.

 Buenas.

Hoy, después de tres o cuatro días sin ponerme con el preludio, lo retomé con mucha ilusión.

Era la una de la mañana, estaba relativamente despejado, así que me concedí un ratito para refrescar lo último que practiqué e intentar avanzar dos o tres compases.

Calenté un poco por libre, lo que ya me debió de dar una pista de los que sucedería, porque me olvidé de los movimientos de las manos y la muñecas me empezaron a doler bastante. Menos mal que se hizo la luz y luego ya seguí sin problemas.

Bastante bien hasta el 12º. Ni un fallo, cómodo, con el metrónomo a 70 ppm. Genial

Paré para apuntar en la libreta los compases para ejercitaros primero en acordes, tal como había hecho en un principio.

Tenía hechos hasta el compas 18.

Uno no se puede fiar de sus fuerzas jejeje, aunque parezca que esté "descansado".

Algunas notas aparecieron en la 2ª octava  😄😄😄

Pero lo más gracioso es que no me di cuenta, y en el compás 21 la mano izquierda hace dos Fas, pues a partir de ahí, si me despisto, me falta teclado por la izquierda  😄😄😄

Claro, en la clave de Fa veía que las lineas adicionales iban bajando y bajando, pues yo bajaba más aún JAJAJAJAJAJAJAJAJA

Cuando me di cuenta, me entro un ataque de risa que tarde en reponerme porque ni veía de los lagrimones que me caían.

Si es que algunos hasta nos llegamos a enamorar de las piedras con las que tropezamos.

Recogí, me he parado a comentarlo, y me retiro para descansar.

Un saludo.

PD: Reírse de uno mismo es sanísimo.

martes, 13 de abril de 2021

05 - Bien ¿Y ahora qué?

 Buenas.





Creo que con las cosas que comenté, uno ya se puede hacer una idea de que concretar un sistema de estudio siendo autodidacta es más complicado de los que pueda parecer.

No es imposible, de hecho muchísimas personas lo han hecho y lo están haciendo, pero requiere cierta actitud.

Me apetece filosofar (por no decir elucubrar jeje).

No puedo decir como en la película, "te has metido en el barro sin el calzado adecuado".

Medité mucho antes de tomar la decisión, incluso sabía que me estaba quedando algo escaso ante lo que se avecinaba, y por supuesto, no tenía ni pajolera idea de lo que se me vendría encima jejeje.

Cuando inicié esta aventura, cada paso que daba me abría, no puertas, mundos.

El universo de la música es infinito o al menos eso acaba pareciendo.
Te aprendes la escala musical o ya la traías aprendida, Do...Re...Mi...Fa...Sol...La...Si...Do.
Pero resulta que ahora, has de saberla al derecho y al revés Si...La...Sol...Fa...Mi...Re...Do.
Pero también has de saberla saltándote una nota, y dos y tres. Tienes que sabértela en todas las combinaciones posibles, y no bastando con esto el sabérselo de carrerilla no sirve, al leer una nota se tiene que saber inmediatamente todo lo que la rodea, pero individualizarla.
Comienzas utilizando muletas para aprender todo eso, pero las muletas hay que ir soltándolas.

Aquí no valen las excusas. Esto es uno, con uno mismo, y solo los resultados dirán como uno se esta tratando a si mismo. No hay donde esconderse.

Desde mi punto de vista meterse en un asunto así requiere mucha humildad, pero no la humildad sumisa que nos venden, no. La humildad que hace fuerte, esa en la que no se compite con nadie por nada. Esa que te saca lo positivo de todo porque te mantiene la mente abierta. Esa que es tan relajada que hace que todo vaya fluido. La humildad sensata que le confiere a uno una energía especial, donde todo se respeta, no hay que ir dando una imagen, y se vive tranquilo y feliz. Donde los inconvenientes se afrontan de frente y sin miedo, y las alegría se valoran mucho más.
Esa humildad donde ya no se espera nada de nadie y todo lo que vaya apareciendo nos pillará, sino preparados, al menos con un ánimo en condiciones.

Solo dependemos de nosotros mismos, lo que o significa que si se necesita ayuda se pida, pero en lo básico solo dependeremos de lo que nosotros hagamos.

Ya no nos comparamos con nadie, porque sabemos que las circunstancias personales son eso, personales. Ya no juzgaremos a nadie, porque no hemos estado con esa persona desde que nació hasta el momento en el que tomo una decisión para saber porque la tomó.

Solo estaremos el piano y yo. Nada más.
Pero eso tiene tanto que ofrecer.

No solo ser un mero espectador de las maravillas que ofrece la música, sino ser participe de su elaboración y su interpretación.

Que maravilloso es poder tocar algo que a uno le haga sentir. Lo que sea, mientras mueva sensaciones.

Cuando empecé a ver los libros con las partituras, iba buscando los títulos en internet para poder oírlas.
Siempre dije que me gustaba la música clásica, pero alguien que no sea un melómano, o casi. No sabe cuanto hay. Era un ignorante. Ahora lo soy un poquirritín menos jejeje

Bach compuso más de 1.000 obras, Vivaldí más de 700, Beethoven no tengo ni idea pero cientos, Mozart, Brahms, Tchaikosvky, Chopin, Haendel, Rachmaninov, Paganini, Wagner, Strauss, etc, etc, etc, pero esos son los que conocía antes de esto.

Ahora conozco a Czerny, a Purcell, a Scarlatti, a Cavalli, y los que me faltan.
Y voy descubriendo temas de compositores que ya conocía y que me dejan impresionado.
Como esta rapsodia de Rachmaninov sobre un tema de Paganini que seguro que muchos han escuchado alguna vez.





Y ahora descubro temas que me es imposible que me sean indiferentes, como el Winter Wind tocado por Richter.....




O el "dichoso" Fantasie Impromptu Op.66 de Chopin del que estoy enamorado y creo que es una de las piezas que a todo el que le gusta el piano le apetecería saber tocar.





Es un verdadero placer, al menos para mi, no solo tener la posibilidad de intentar aprender música y de tocar el piano (digital 😄), sino el poder disfrutar de todo lo que se descubre cuando uno inicia esta aventura.
Verdaderas maravillas por las que merece la pena estar vivo.


Por cierto, ya sé tocar a Mozart 😄 😄 😄





Un saludo.










04 - Procrastinación, flojeras y otro "peros"

 Buenas.

Según voy consiguiendo información, poniéndola en práctica y dándome cuenta con cual es con la que más empatizo, también voy descubriendo que todas tienen la misma coletilla ¡¡¡ Hay que practicarla !!!.

Viendo un reportaje sobre los grandes violinistas de los últimos tiempos, Yehudi Menuhin contaba una anécdota que tuvo con David Oistrakh.

Menuhin le comentó que le encantaba la velocidad de su staccato, a lo que Oistrakh le respondío que en tres meses sería capaz de poder hacerlo igual.

Menuhin confesó que nunca lo logró.

Solo pensar en el nivel tan alto de estos dos grandes músicos. Que uno le dijera al otro que eso estaba chupado y que en ¡¡¡ tres meses !!! lo lograría y la confesión de Menuhin de que no lo consiguió, lo que hace pensar que lo intentó. Creo que da una pista más que clara de lo que supone tener que practicar.

Si alguien con esa capacidad musical, que ya lo sabe todo de teoría, que lleva 30 años dale que te pego a un instrumento, le diga a otro que con práctica mejoraría algo que ya hace bien en tres meses. Eso es una lección de actitud.

Uno de mis mayores inconvenientes actualmente, es el de no disponer de horarios regulares para estudiar y practicar. Las circunstancias personales me lo impiden y en este caso las prioridades saltan cuando uno menos se lo espera y pueden surgir muuuchas veces al cabo del día.

Esto no es una queja, es una circunstancia que comento porque influye en mi aprendizaje teniendo que adaptarme a ella, como cada tendrá que adaptarse a sus propias circunstancias.

Y con esto quiero llegar a los hábitos. 

Una afición se cuela en nuestra vida y debemos adaptar la forma en la que la vivimos para poder encajarla como buenamente podamos.

Desde el desconocimiento de las necesidades que tiene uno como autodidacta, al principio, o mejor dicho, cuando ya tenemos "las manos en la masa", no nos damos cuenta de que esto nos exigirá más tiempo del que suponíamos y ahí es donde entran en juego, los hábitos.

Un hábito es algo que se realiza de manera fluida, casi sin esfuerzo y en lo que uno se obliga poco a la hora de cumplirlo porque ya se va a el de una manera, más bien, natural.

Como todo en su inicio, los comienzos cuestan un poco (o mucho), por eso hay que generarse "el hábito" de hacerlo.

Hay diferentes formas más o menos testadas, pero lo que más le preocupa a todo el mundo es "¿cuanto tarda en llegar el hábito?". Según alguna universidad 21 días. 😊

La verdad es que dependerá de la regularidad con la que uno aplique su sistema de estudio y práctica.

No tiene porqué tardar mucho, pero lo que es seguro, es que no será de la noche a la mañana.

Algunas personas me comentaron que es frecuente que si uno está practicando y algo no le sale, no debe preocuparse, pasado un tiempo puede intentar volver a hacerlo y quedarse sorprendido al realizarlo mucho mejor. He pasado por eso con lo cual puedo decir que es cierto. Pero eso ocurre si se practica.

Hay (y lo escribo para no olvidarlo yo) que practicar con continuidad. Excederse no es bueno, al igual que no lo es quedarse corto.

Hasta el pan necesita su tiempo de horno, si se saca antes sale crudo, si se saca después sale quemado.

No hay que emplear el mismo tiempo de practica si se llevan tres días mal contados, que tres años. Todo tiene que ser progresivo. Mente y cuerpo han de adaptarse, y todos los que empezamos con unos cuantos años encima no pretendemos llegar a concertistas de élite, así que no tenemos porque sentirnos presionados por nada. Ni por nosotros mismos.

Después de hablar en varias ocasiones conmigo mismo tomé la determinación de no hablar del tiempo que llevo con esto, y si lo hacia no medirlo por días, meses o años, sino por horas.

Que más me da decir que llevo dos meses con esto, si en estos dos meses solo practiqué 10 minutos al día. Por muy aprovechados que fueran, sería demasiado poco.

Que más me da decir que llevo un año, si a las dos semanas tuve contracturas por exceso de práctica y tuve que estar tres meses sin poder tocar.

Hay que hacerlo de la manera más inteligente posible, pero ante todo disfrutando. Si uno no se dirige a su piano ilusionado, algo falla.

En esto hay que disfrutar el camino desde el principio.

Pondré aquí este vídeo que es oro en paño, de verdad.





Cada paso, cada práctica, cada error que educa, sin pretensiones, sin grandes metas, sin futuro, disfrutando del momento y todo lo que ello ofrece. Hay que valorar.

Se hace la práctica concentrado y atento y cuando sea la hora de finalizarla, se acabó. No hay que pensar más en ello hasta la siguiente practica o lección.

Uno se puede entretener ejercitando lectura como el que hace un sudoku, vale, es está bien. Pero el tiempo de practica debe ser el que uno acordó consigo mismo, ni más ni menos.

Ese gen tonto (así lo llamo yo) que nos hará procrastinar, encontrar mil excusas para no...., el ahora no apetece,  etc, nos pondrá dos grandes frenos, uno en nuestra necesidad de crear un hábito, y el otro en lo que estemos aprendiendo.

Siendo autodidacta soy amable conmigo, pero intransigente. No me puedo permitir el "no hacer" Por qué? por una razón simple y aplastante..... soy muy vago.

Si, soy vago, y como lo sé, lo que hago es intentar hacer las cosas lo mejor que pueda la primera vez para tener que repetirlas la menor cantidad de veces.

Soy vago, pero no soy "un dejado" con lo cual doy el pego jejeje. Eso es lo que me ayuda a esforzarme en practicar. De hecho se que soy también muy inteligente por las cantidad y calidad de excusas que puedo llegar a encontrar para no hacer algo 😄😄😄

La verdad es que soy vago si no estoy haciendo algo productivo.  Como mucha gente. Si me gusta lo que hago, tiendo a volcarme.

Como en su momento leí que era bueno grabarse para ver las posibles cuestiones a corregir, lo hice.

Sugiero no verlo, no por "miedo escénico", sino por aburrido jeje.

Se puede ver una hoja de un libro de practicas impresa en A3 para ver mejor las notas. Cosas de principiante JAJAJAJAJAJA.




Mi puesto de música.

Trípode para cámara que a la vez sirve para apoyar los cascos que utilizo para no molestar, y que también es el soporte para una lampara de lectura de leeds para no encender la luz de la habitación.

Huevo verde que me sonríe. Nadie anda sobrado de sonrisas jejeje. Temporizador y foto con San David Oistrakh y San Sviatoslav Richter. Muy milagrosos ellos 😄😄😄

Al fondo plumero para después de cada práctica, es lo que tiene ser fumador 😉

Un saludo.


lunes, 12 de abril de 2021

03 - Absolutamente todo es cuestión de actitud.

 Buenas.

Como iba diciendo. 

Ojos manos y cerebro no funcionaban.

Voy sabiendo (más o menos) donde va colocadas las notas, pero mis ojos tienden a seguir un ritmo de lectura "tipo libro" y eso es excesivamente rápido. No hay forma de frenarlos.

Mis dedos están agarrotados. Adopto las posiciones que aprendí, pero más que tocar las teclas, tal parece que mis dedos quieren imitar a Freddy Krueger y encima, a los cinco minutos de estar tocando, los dedos, las manos, las muñecas y los antebrazos ..... duelen.

Quito las manos del teclado, las dejo reposar sobre los muslos y me quedo mirando las teclas. Son preciosas. Me centro en ello para, mientras respiro, mantener la calma

Aequam memento rebus in arduis servare mentem

(Recuerda conservar la mente serena en los momentos difíciles)

"Es normal", me digo. "Nadie te dijo que fuera a ser fácil, al contrario", "solo es que estás oxidado", "es cuestión de practicar, paciencia". "Solo estás levantando el pie para dar el primer paso, hasta eso requiere esfuerzo".

Esa frases y muchas otras me las tuve que repetir siendo muy amable conmigo mismo porque necesitaba ese consuelo para no precipitarme. Necesitaba recordar lo que otros me enseñaron, en esto también uno se puede lesionar y puede resultar grave.

Tengo bastante experiencia con lesiones traumatológicas y se lo que son sus convalecencias.

Lo primero, que suponen mucho tiempo de recuperación. Lo segundo que uno no se debe fiar de sus propias fuerzas en una recuperación, y lo tercero, la actitud.

En la vida es vital mantener una buena actitud. Es fundamental encontrar lo positivo en todo, hasta en lo que no creemos que lo tenga, pero siempre hay algo bueno que aprender de todo.

En este tema del aprendizaje, si no hay una buena actitud y una buena predisposición, mejor no empezar. Así es como yo lo entiendo por mi experiencia, y no solo en esta faceta.

Estuve así dos o tres días y claro, como soy una persona de soluciones, necesitaba solucionar todos estos temas.

Pero en los libros/métodos no te enseñan a leer en condiciones. Un libro no te va diciendo lo que debes hacer en cada momento, eso lo hace un profesor/a.

Así que cogí el Alfred y el Aaron y los aparté.

Me dije "El Schmidt me está sirviendo para hacer ejercicios, el Francisco Moncada me está enseñando la teoría que necesito, pero ¿y el sistema?"

Recurrí al Bastien. Me paso otro tanto de lo mismo y también lo aparte.

Repito que son métodos buenísimos, cuando se utilizan con profesor.

Iban ala par el estudio de la teoría musical y la búsqueda de un sistema que me ayudara a seguir un ritmo. Seguía mirando vídeos de profesores/as en internet. Seguía leyendo experiencia en el foro. Seguía buscando publicaciones que me pudieran orientar. Pero nada me aclaraba el camino, al contrario.

Una noche que estaba mirando videos guardé algunos que me gustaban por como explicaban ciertas cuestiones y al lado tenía el Francisco Moncada. Y tuve una epifanía.

"Coñe, todo está ahí, pero está desperdigado". "Es un rompecabezas, solo hay que juntar las piezas".

Y lo vi clarísimo.

La mayoría de profesores (porque no estoy en condiciones de decir todos) han aprendido con ayuda, no se pueden poner en la cabeza de alguien que lo haga de forma autodidacta, porque ellos no lo hicieron. No son culpables de nada. Solo es que lo explican ¡¡¡ suponiendo !!! como lo debería hacer un autodidacta. Ese es el error.

Lo que yo, como autodidacta tengo que hacer es, coger esa información y moldearla a mis necesidades.

Claro, los profesores dan por sentadas ciertas cuestiones que, por el hecho de no haber pasado por ellas, no las tiene en consideración.

Ejemplo. Si un profesor está con un alumno, el puede ir enseñándole a mantener los compases a la vez que el alumno va tocando una pieza X. Peeeero, si ese profesor/a hace un vídeo ¿tendrá la ocurrencia de hacer uno primero enseñando a acompasar antes de meterse por la pieza?.

Por los videos que vi, parece ser que no. Se tiran a enseñarte la pieza, la digitación y algunas cuestiones más, pero dan por sentado que ya sabes manejar los compases.

El autodidacta, ¡¡¡ debe saber !!! que ¡¡¡ debe aprender !!! primero a manejar los compases.

Tiene que hacer ejercicios de compases antes de meterse por una pieza, y tiene que hacerlos hasta que le salgan fluidos, debe practicarlos mucho.

Y se hizo la luz.

Debía encontrar lo que no se enseña desde el principio para entender mejor lo que si enseñan en todos lados. Esa es la piedra filosofal del autodidacta. (Visto desde mi perspectiva y experiencia, claro está).

Según lo veo, y me fijo mucho en los grandes interpretes que son los que me lo transmiten, la música en su totalidad (desde la teoría, hasta los sonidos) está formada por hilos en los que todos se tocan, todos están en contacto unos con otros.

El que la toca es libre de saltarse notas, acentos, uniones, intervalos, cualquier cosa. Pero en la partitura todo está relacionado entre si. No hay ni una sola cosa que se salga de la dinámica de la obra. Todo es perfecto.

Así que si quiero saber leer eso que tengo delante, tengo que saber, comprender y asimilarlo todo.

Desde donde está situada la clave, si lleva armadura entenderla perfectamente y comprender su porqué, que me quiere decir el compas que va después, etc, etc, etc. tengo que comprender y saber utilizar todo, porque como me encuentre una sola cuestión que me cree duda me atascaré y no lo haré. Ni bien, ni mal, no podré avanzar.

Con esto quiero transmitir que en la búsqueda de información cuando se hace por cuenta propia, ese escollo existirá. El de la información "olvidada". No es que exista una conspiración para que no se sepa, que va. Son cosas que los que transmiten la información se olvidan de poner porque la dan tan por sentada que ni se les ocurre.

Pues esa es la labor que llevo haciendo desde hace semanas. recopilando y ordenando lo que necesito para que el aprendizaje vaya fluido, y está resultando.

Se van encontrando cosillas aquí y allá y se va tomando nota.

Esto ayuda muchísimo a la hora de hacer las búsquedas, porque ya se concreta lo que se necesita.

Para mi está siendo muy importante. Para los que estén aprendiendo con profesor/a probablemente ni se den cuenta de que lo están aprendiendo jejejeje, mejor para ellos, menos trabajo que tendrán que realizar. En mi caso me estimula porque me ayuda a ver que voy avanzando.

No es sencillo, de verdad. Al menos para mi no lo está siendo. Puede que para alguien más capacitado le resulte más sencillo, cada uno somos un mundo. Pero puedo asegurar, que ni es aburrido ni inútil, porque a la par de ir buscando lo que se necesita, se van encontrando oras cosas que son interesantísimas.

Aparte de que eso, entre esas cosas interesantes que aparecen, sin uno darse cuenta va afianzando lo que ya va aprendiendo y entendiendo mucho mejor pequeñas dudas que fueran surgiendo.

Comprender esto es muy bueno.

Uno no debe culparse o culpar a otros por nada. Debe buscar soluciones y al buscarlas, encontrará mundos.

Y si no se me cree, ya os topareis con los intervalos JAJAJAJAJAJAJA

Un saludo



domingo, 11 de abril de 2021

02 - Suponer raramente se acerca a la realidad

Buenas.

Entre todo ese proceso de asimilación de información que me iba abrumando, tomé la decisión. Intentaría aprender música y a tocar el piano.

Los datos me iban mostrando que, donde me iba a meter, sería exigente y las razones en contra no tenían el suficiente peso para hacerme desistir.

No estaba tomando una decisión desde el empecinamiento, al contrario. Estaba siendo muy consciente de lo que hacía. Era un capricho, una afición, pero también veía la parte positiva en ello y los beneficios que me podría traer.

¿Cuánto estaba dispuesto a poner de mi parte? esa era la pregunta que más me hacía. Y tuve que ser muy sincero conmigo mismo y eliminar cualquier excusa para saber hasta que punto me apetecía realizar ciertos sacrificios personales. Sobre todo en el cambio de hábitos. Hay muchas circunstancias personales influyendo alrededor que hubo que tener en cuenta. Muchas de ellas muy importantes, al menos para mi. Claro está.

Fue a partir de la esa toma de decisión cuando la búsqueda de información se volvió más "seria". Lo primero de todo era aprender como aprender.

Elegí el ser autodidacta por varias razones, aunque las de más peso eran las relacionadas con ir a "mi ritmo". No me apetecía (de momento) que alguien me impusiera un ritmo en el que no me sintiera a gusto.

Era consciente de que el aprendizaje sería más lento y más duro, pero también más llevadero al no estar condicionado por alguien. Sé que es una tontería y que los profesores se adaptan, pero por ahora lo prefiero así. 

Otra de las razones importantes es que mis horarios son caóticos. Tengo mucho tiempo, pero no siempre puedo disponer de el de una forma constante para poder estudiar de una manera ordenada en el tiempo. Los imprevistos suelen estar ahí cada poco. Es lo que hay y con lo que se debe bregar. No queda otra.

Ya tenía información suficiente para saber que tres partes formarían mi aprendizaje:

Un libro de teoría musical (solfeo).

Un libro/método de aprendizaje.

Un libro de ejercicios prácticos.

Como ya comenté, elegí el libro Teoría de la Música de Francisco Moncada porque para alguien que empieza desde cero es muy sencillo de llevar, sirve como libro de consulta y es muy completo. Puede que sea algo conciso en ciertas explicaciones, pero no mucho menos que el resto. Se puede complementar con otras fuentes.

Como libros/métodos de aprendizaje elegí dos del grupo de los más conocidos, el Curso para piano de Michael Aaron (libro I de tapa azul) y el Curso Todo-en-Uno para adultos de Alfred.Pasado el tiempo adquirí también otro de los cursos más utilizados, el Curso para Piano para Principiantes Adultos de James Bastien.

Mi opinión sobre estos cursos es que son estupendos de verdad. Comprensibles, con prácticas sencillas, progresivos, unos con más información sobre teoría que otros, pero en general, muy buenos.

Peeeeeero, está claro que se necesita un profesor al lado para estudiarlos..

Para mi, persona autodidacta que comienza sin ningún tipo de orientación, me pueden complicar la vida.

Se entenderá mejor cuando retome la explicación de como estoy afrontando el sistema de aprendizaje.

Como uno ya tiene una edad en la que se necesita desoxidar, habrá que hacer gimnasia, así que encargué dos libros que son muy conocidos y utilizados.

Uno es el Álbum para Anna María Magdalena Bach.

Anna María Magdalena Bach fue la segunda esposa de Juan Sebastian Bach a la cual dedicó dos cuadernos de prácticas para teclado. Ella era soprano, así que ya tenía conocimientos musicales, por eso estos pueden ser algo "avanzados" para iniciarse, aunque se utilizan mucho ya que en ellos hay piezas bastante fáciles.

El otro que encargué es el Schmidt, Ejercicios Preparatorios para Arpegios y Escalas.

Es uno de los "libros conflictivos" ya que son solo ejercicios, no trae melodías por lo que muchos lo consideran aburrido, pero es muy práctico.

Ya comentaré algo sobre el otro "conflictivo" jejeje (Hanon)

A todo esto ya me había plantado en Febrero de este año e ingresado en un foro de pianistas (en link esta ahí para quien lo desee) y ya había empezado a darles la brasa con las típicas cuestiones de novato.

Iba ojeando los libros e intentando aprender pequeñas cosillas, pero más que nada para ver como podía orientar el sistema de estudio. Una cosa esta clara, para aprender a tocar el piano, al principio no hace falta piano jejeje.

Pero este llegó. Un Roland FP10.

No es un piano pretencioso, ni con muchas "chuches". Es un piano digital para iniciarse, solo eso.

Tiene lo que se sugiere que tenga un piano digital medio decente para iniciarse desde el cero más absoluto.

Bastante buen sonido, 88 teclas contrapesadas con un tacto más que decente, que ocupe poco espacio, que se le puedan enchufar unos cascos para no tener problemas, poder ponerle un pedal decente, un precio por el cual no tengas que vender un riñón y poquito más. Para mi más que suficiente y contento si me aguanta los tres (o cinco) primeros años de aprendizaje.

Antes de continuar con el sistema de estudio, tocaré este tema que lleva poco tiempo y no va muy relacionado con lo demás.

Hay muchos tipos de instrumentos con teclado "tipo piano". Aproximadamente, de más a menos:

Pianos acústicos de cola. (Digamos que los pianos de verdad jeje)

Pianos digitales de cola.

Pianos acústicos de pared o verticales.

Pianos digitales de pared o verticales.

Pianos híbridos. (Pueden tener diferentes formas)

Pianos de escenario. (Digitales)

Pianos digitales. (A secas y más de "andar por casa")

Teclados controladores MIDI. (Para aquellos que utilicen ordenadores. Muy pequeños)

Teclados para niños. (Con teclas mini)

Luego existen los teclados enrollables, los plegables, pianos de cola plegables, y un sin fin de tipos más.

Pero para empezar, una vez que se decida uno a hacerlo, las 88 teclas contrapesadas son lo que más nos acercará a un piano de verdad.

Dados los tiempos que pasamos, lo de probarlos era una quimera, así que intenté fijarme bien en todos los videos de comparativas que pude y sabiendo que tendría que ser para que me durara unos años (es la medida de tiempo cuando se intenta aprender a tocar el piano en condiciones jejeje), pues elegí este.




Ya con los libros y el piano en casa, había que empezar a organizarse. Aquí retomo "la locura" de intentar estudiar.

Inicio el estudio de la teoría musical. Si no se sabe la teoría, la se podrá aplicar jejeje.

A la vez "jugueteo" un poco y le voy echando un vistazo al Alfred. Todo parece ir bien, pero noto sensaciones extrañas y poco a voy voy dándome cuenta de lo que no funciona.

Mis ojos no funcionan, mis manos no funcionan y mi cerebro no funciona.

Luego más.

Un saludo

01 - Empezando a empezar.

Este blog solo contará mis experiencias desde que decidí iniciarme en el aventura de aprender música y tocar el piano de forma autodidacta desde el cero más absoluto, sin haber tenido más relación con ella que la de cualquier persona cuando se pone la radio, un CD o disco o se va a la discoteca o bar de turno.

Antes de comenzar haré una sugerencia. Si uno pretende aprender música de verdad (teoría musical, solfeo), si tiene posibilidad que contrate un profesor/a, asista a clases en academias, centros municipales o si puede vaya al conservatorio. Le será mucho más cómodo y aprenderá más rápido que si va por libre.

Tengo casi 57 años, con lo cual me expresaré más bien para personas adultas.

No pretendo que sea una guía para nadie, ya que lo que a unos les puede convenir a otros les puede perjudicar. Pero si daré información que otros podrán valorar y utilizar si la precisan.


Comienzo jeje.

Los pianos siempre me llamaron la atención. Tanto su aspecto como sus sonidos.

Llegué a plantearme a veces decirles a mis padres que me gustaría aprender a tocarlo, pero nunca me atreví.

Había un compañero de clase que iba al conservatorio y sabía tocar el piano. Desde ese día, siempre que lo veía pensaba “jo, sabe tocar el piano”.

De vez en cuando a lo largo de mi vida pensaba en ello, pero me quitaba la idea de la cabeza rápido, y muchas veces pienso que hice bien.

Ahora muuuuuchos años después de esas primeras sensaciones, la idea volvió de una forma más viva y constante.

Sobre finales del 2020 me senté conmigo mismo y empecé a valorar aprender a tocar el piano. Comencé a informarme de las maneras en las que lo podía hacer y sobre todo, que fuera sin tener que aprender solfeo. (Pobre incauto de mi jeje)

Soy consciente de la edad que tengo, y lo suficientemente consciente de mis facultades mentales y físicas como para saber que lo más que puedo conseguir es aprender para mi disfrute personal.

No soy pretencioso, pero si intentaré llegar al tope de mis facultades para intentar hacerlo lo mejor que pueda y eso, disfrutar de la música que me gusta.

Busqué métodos, tutoriales, libros, pregunte a personas relacionadas con la música. Conclusión, para lo que yo quería había que pasar por el aro del solfeo.

“Bueno”, me dije, “todo sea por intentar hacerlo medianamente bien”.

Empecé a leer cosillas en internet que me iban acoj…… acongojando cada vez más y más, pero pensaba que mucha gente lo había estudiado y nadie se murió por ello.

Morirse no, pero no valoré los que acabaron tarumbas o lo dejaron por imposible.

También oí esa famosa frase de , “es como aprender un idioma”, las narices. A ver quien se atreve a decirme eso ahora a la cara. Escuchará lo nadie se atrevería a decirle.

Puede parecer que estoy exagerando un poco, pero puedo asegurar que no.

Lo primero es que no es lo mismo tener un profesor que te vaya guiando y poniendo delante lo que se va necesitando para aprender, que buscar por uno mismo una información que le es completamente desconocida en todos los aspectos.

Cuando crees que encuentras unos datos fiables, al segundo encuentras otros que contradicen los primeros. Luego das con los que te dicen que te enseñan música sin solfeo (a partir de ahora emplearé el otro termino que es teoría musical), te dicen que pongas las manos así y así y que sigas los ritmos, y cuando ya has malsacado un par de notas te sueltan “ese dedo debes ponerlo en esa tecla que es Do”.

¡¡¡ Un momento !!! ¿No habíamos quedado en que nada de teoría musical?, porque saberse la escala y donde está en el piano es teoría musical, y claro viene el típico “Si, no, ya, pero es que……..”.

No existen los métodos, cursos, o lo que sea milagroso. SI puedes aprender 4 acordes y acompañar unas cuantas canciones. Pero no pretendas ir mucho más allá.

A muchas personas les “entran las ganas” de aprender a tocar un instrumento (sigo con el piano porque es por donde yo voy). Miran y remiran pianos, pianos digitales, pianos de escenario, pianos acústicos, etc, etc, etc, y se acaban comprando uno. Genial, todo son albricias. Cuando ya baja el alegrón llega el “¿y ahora que?”. Es normal, no pasa nada.

Cuando empecé a buscar material para iniciarme en la teoría musical, casi lo dejo. Hay para aburrir.

Más conocidos y menos conocidos. Al final acabé con 4 o 5 en casa. Si, los tengo todos apartados jejeje.

Según me ponían con ellos, había cuestiones que no me cuadraban. Signos que no comprendía y palabras que me sonaban muy técnicas y avanzadas para alguien que empieza desde cero.

Me pasaba lo mismo en internet. Buscaba sobre la escala musical y leia u oía “esta nota va en séptima disminuida” ¡¡¡¡¡¿¿¿¿¿ Queeee ?????!!!!!. Y eso a lo mejor en la 3ª o 4ª página del libro.

Esos métodos están muy bien (de verdad) cuando tienes algo o a alguien que te los explique.

En el caso del “alguien”, no necesito extenderme.

En el caso del “algo”, la cosa se complica. Hace falta otro libro. Un libro sobre Teoría Musical.

Claro, en este punto uno se cree que lo tiene fácil. Existen los conservatorios, los conservatorios tiene libros, por lo que buscaré un libro de algún conservatorio.

¡¡¡ Ya !!!

No todos los conservatorios utilizan los mismos textos, aparte de que los programas de los conservatorios también cambian, aparte de eso, y dicho por quien fue a conservatorios, en algunos se pasaron tres años sin tocar un instrumento y solo tirando de libros. Un caos.

Uno se resigna (…. mentira, pillaba unos cabreos del quince) y continua la búsqueda hasta horas intempestivas en internet. Se van cribando los profesores que explican las cosas con lo que uno supone que es más o menos coherencia y se va tomando nota.

Aparte se siguen buscando libros e intentando ver los índices (difícil que los traigan) para intentar poder entrever algo que de una mediana guía a lo que se busca. Lo de pretender un “aquí te pillo, aquí te mato” y encontrar el Santo Grial, hay que olvidarlo.

Al final seguí una sugerencia de un profesor y pianista que tiene un canal que me parece bastante bueno y que se llama Daniel Gregorio y me hice con el libro “Teoría de la música” de Francisco Moncada. Comprarlo aquí es prácticamente imposible, en Mexico de donde es, casi también, pero “lo hay por ahí”.

Bien. Ya tenía la primera llave del cofre del tesoro. Un libro de teoría musical donde explica bastante bien lo que necesitaba…….. o eso creía yo. Porque el libro está genial, pero hay que saber utilizarlo. No basta con estudiarlo, ¡¡¡ Que va !!!, hay que saber aplicarlo.

¿De que me vale saber que una blanca es igual a dos negras, si no sé aplicarlas en el ritmo adecuado?, pues de nada. Así que tengo que aprender ritmos (ese tres por cuatro, o cuatro por cuatro o siete por nueve que vemos al comienzo de las partituras).

Pero ¡¡¡ ALTO !!! que antes de eso están las claves. Clave de Sol = 𝄞, y clave de Fa = 𝄢, que para más inri pueden estar seguidas de sostenidos = ♯, o bemoles = ♭.

Dicho a lo burro, la clave es la que te da la referencia para saber que nota es la que estás leyendo. Los bemoles y sostenidos también pero de otra manera. Ya lo aprenderéis a quienes os tiréis a la piscina jejejejeje.

Pero ¡¡¡ QUIETOS PARAOS !!! que faltan los compases. Esos números en forma de fracción que se ven detrás de las claves. Uno de los más famosos el 3 x 4 de los valses, que se escribe ¾ pero se lee 3x4. Esos dicen la cantidad de notas que caben en un compás y su ritmo. Mááááá´s o menos.

Los compases son todos lo que hay en una partitura menos el primero que se llama anacrusa.

Aquí, yo habré dicho “pero ¿por qué?” como unas dos mil veces. Que nadie se haga esa pregunta mucho. Mejor no sufrir y muchas respuestas vienen según se avanza.

Bueno. Aquí parece ser que la cosa ya va encaminada. Y una leche.

(Continuará en la siguiente entrada. Que nadie se asuste, mejora, pero no se puede decir todavía cuando jejejeje)